La ciudad de Leganés ha sufrido una oleada de robos en los últimos dos meses, en los que un total de 7 locales fueron asaltados. Muchos de los asaltos se produjeron utilizando el método del alcantarillazo, es decir, levantando las alcantarillas de la calle para estamparlas contra las lunas de los distintos establecimientos. Otros de los robos se llevaron a cabo arrancando verjas de los negocios, arrastrándolas con un coche.
Desde Telemadrid acudieron a la cafetería Bilbao, en el barrio de Zarzaquemada, donde se produjo un robo en la madrugada del pasado lunes. Según comentó el dueño a la televisión regional, “el ladrón llegaba andando tranquilamente, desprendía una rejilla de alcantarilla del suelo y golpeaba el cristal de uno de los ventanales del local, ayudándose de un hacha para conseguir abrir completamente el hueco sin cortarse al entrar”. Según estiman, esta operación le llevó al ladrón tan solo unos 30/40 segundos.
Así, llegaba a su objetivo, que eran las máquinas tragaperras, que destrozó a martillazos para llevarse la recaudación de las mismas, que ascendía a “unos mil euros”, estiman en la noticia redactada por Telemadrid. En total, el individuo tarda cerca de “1 minuto y 45 segundos” en entrar y salir del bar, aseveró el hostelero, quien facilitó las imágenes de las cámaras de seguridad a Telemadrid. Otro de los bares de esta zona “ha sufrido en los últimos meses hasta cinco robos”, según comentaban en la televisión.
Ante esta oleada, la Asociación de Hosteleros de Leganés y los vecinos de la ciudad exigen más presencia policial en las calles. De hecho, están incluso planteándose organizar patrullas vecinales con palos para evitarlos. Asimismo, han pedido al Ayuntamiento sellar las tapas de las alcantarillas para que no sea tan fácil levantarlas.